Hoy 30 de julio no tenemos clase en la escuela por ser el día de los becados. Todos los años se cita a los becados en un día para que puedan recoger el material escolar y el uniforme y se actualicen las fotos. Teníamos casi todo preparado del día anterior, así que nos dirigimos a la escuela pronto, después de la oración, para terminar de preparar los últimos detalles. Se acercan los niños de la escuela y del liceo. Los de la escuela pasan primero por un aula donde recogen el uniforme, y todos pasan después a recoger el material escolar, que está separado por cursos y en escuela y liceo.
En el transcurso de la mañana llueve dos veces, la segunda vez más fuerte que la primera, y dificulta que algunos niños salgan a por su material, por lo que se les entregará mañana.
Después de comer nos dirigimos al Batey. Al estar acercándose el fin de las clases los alumnos se encuentran muy activos y no paran quietos. Llega el receso y como siempre, se brinca con la soga, se juega con la pelota o se juega al escondite.
Al llegar a casa, aunque el día haya sido muy intenso, sacamos energía para salir a jugar con los vecinos que nos esperan con los brazos abiertos en la puerta de casa, mientras otro grupo se dirige a Misa, en la que anuncian que mañana empezarán las fiestas patronales de Santo Cura de Ars. Hoy jugamos al volley un grupo muy grande, cada vez se junta más gente y nos conocemos mejor.
Terminamos el día con planes para las clases del día siguiente y de las últimas clases del Batey.
¡Hasta el próximo día!